Cinco espacios en Perú para entrar en contacto con la naturaleza

¿A qué no sabías que estos lugares eran áreas naturales protegidas?

Las áreas naturales protegidas representan el 17,3% del territorio terrestre del Perú. Al interior se encuentran representadas las ecorregiones del país, cada una con su deslumbrante flora, abundante fauna, diversos ecosistemas y hermosos paisajes. Esta riqueza natural, una de las mayores del planeta, constituye un valioso patrimonio natural de cuya conservación y protección somos todos responsables.

Parque Nacional del Manu (Madre de Dios)

Es un destino de turismo natural por excelencia. Atraviesa punas de hasta cuatro mil metros de altura, montañas boscosas, pequeñas quebradas, valles y bosques nublados de selva alta, hasta llegar al llano amazónico. Sus múltiples pisos ecológicos la convierten en una de las áreas con mayor biodiversidad. Ideal para la observación de flora y fauna –aves especialmente-, realizar caminatas y paseos en bote. Para visitar este parque es necesario contratar una agencia de viajes autorizada.

Reserva Nacional Pacaya Samiria (Loreto)

Un refugio de la biodiversidad inaudito: en esta reserva amazónica, de más de dos millones de hectáreas, viven 527 especies de aves, 102 especies de mamíferos –entre ellos, el delfín rosado-, 69 especies de reptiles, 58 especies de anfibios, 269 especies de peces y 1024 especies de plantas silvestres y cultivadas. Tiene, además, el área de bosques inundables protegida más extensa de la región.

Parque Nacional Huascarán (Huaraz)

Protege la cordillera tropical más extensa del mundo. En este parque hay 712 glaciares, 434 lagos, 40 ríos y numerosas montañas, muchas de ellas de más de 6 mil metros de altura. También funciona como refugio de una abundante flora y fauna silvestre. Y es considerada por BirdLife como un paraíso para la observación de aves andinas. En su territorio hay, además, 33 sitios arqueológicos preincas.

Reserva Paisajística Nor Yauyos Cochas (Lima)

Los más bellos paisajes de Lima se encuentran aquí: este espacio alberga decenas de laguna (cochas), caídas de agua, andenes, cuevas, valles y comunidades campesinas en apacibles pueblos (los andenes en Laraos, los puentes de piedra en Vitis, las cascadas en Huancaya). Posee el ecosistema característico de los Andes, pues abarca la sierra de Lima y Junín, aunque con su propia flora (queñuales y puyas Raimondi) y fauna (zorros andinos, vicuñas, venados y vizcachas).

Reserva Nacional de Paracas (Ica)

Esta área protegida abarca más de 33 mil hectáreas –dos terceras partes corresponden a aguas del Océano Pacífico y una tercera parte, a islas y tierra firme-. En sus ecosistemas habitan 216 especies de aves, variedad de zooplancton y, al menos, 20 especies de cetáceos. Es conocida por sus vientos intensos –ideales para los deportes náuticos- y la aridez extrema de su desierto. Sus playas también están preparadas para el turismo, y tiene alternativas para practicar buceo, pesca deportiva, kayak, parapente, ciclismo y trekking.